viernes, 9 de octubre de 2020

 

¿Qué sería la vida sin los cambios?

¿A dónde iríamos?

¿Quiénes seríamos nosotros?

Si cada cambio en la vida nos transforma, 

nos vuelve más humanos, más sensibles, más perceptibles.

Somos más de lo que creemos que somos, 

somos polvos de estrellas, viviendo un instante en la eternidad.

Nos volvemos mundanos, creyéndonos nuestros títulos, nuestros éxitos,

nuestros logros, cumpliendo roles, pero realmente, ¿eso somos?

El ser no viene a cumplir las expectativas, el ser viene a sentir, a vivir, a recordar...

Venimos a ser no a tener, y eso es algo que hemos olvidado,

pues lo que nutre el alma, lo que llena el corazón nunca estará en lo externo,

pues eso solo es del ego, el ser se nutre del dar, se nutre de amar, se nutre de lo 

intangible, pero de aquello que puede llenar cada poro de su alma.

Venimos a recordar que somos mucho más...

Ann



Me encuentro aquí después de 6 años y algo me regresó a buscar mi antiguo y único blog, donde siempre escribía y me expresaba, por lo que leo lo estuve nutriendo por 6 años desde el 2008, en fin, quizá todo sea cíclico, o tal vez no, pero lo importante es que algo me atrajo de vuelta, y creo es el contacto con mi alma y con las letras, que son la conexión directa con mi ser interno... así que aquí estoy de nuevo, y espero volver a leerlos y que me lean los que quieran, hay unos blogs que seguía y me seguían y veo que también tienen varios años de no escribir nada, felicito a los que han continuado, eso habla de mucha constancia, pero todo es válido aquí, los recesos también ayudan aunque bueno, si que me llevó un poco más, pero agradezco que aún recordaba mi contraseña, ahora todo lo tenemos a mano, el internet, los mil blogs, pero este para mí sigue siendo íntimo, y eso es lo que busco, sobre todo para expresar en un mundo del silencio, donde las palabras a veces sobran cuando el alma grita, así que bienvenid@s a este nuevo ciclo que comienzo aquí.

Ann