Me arrebatas el silencio, me robas la verdad,
la que no me pertenece, la que jamás ha sido mía,
la que no comprendo y no puedo ver...

Desbaratas mi intención, mi ilusión de encontrar,
un sentido, un motivo que mueva mi fe,
ante tanto sigo en pie, reencontrandome,
analizando cada paso de mi andar,
no quiero detenerme, no ahora, quiero avanzar...

He recorrido mundos, he conocido el amor, el dolor,
la soledad, el vacío, la felicidad pura, el placer con amor,
sin amor, con heridas...

He bebido de tu adiós, tantas veces, que se me ha quitado la sed,
no quiero más...

He buscado en las afueras, en mis intentos, en mis fracasos,
en mis logros, en lo que soy y lo que me conforma,
y aún no encuentro lo que quiero, aún no me llega,
pero he decidido dejar de buscar, esperar que ese algo me encuentre a mí,
dejaré todas las señales, todas las pistas necesarias,
para no perderme, para ser visible, para poder brillar...

El amor encuentra el amor, en cualquier lugar, en cualquier momento,
en el momento menos inesperado...

en el momento preciso, exacto... a su tiempo

ANna