martes, 26 de enero de 2010


Algo que encontré por ahí, y lo comparto, porque así siento:

Miro atrás y pienso en el recorrido del camino y veo que ido a grandes y pequeños pasos. Veo logros y pequeñas derrotas, que más que nada las siento como aprendizajes. Y que me han ayudado a sentir la necesidad a no volver a cometerlas. Y así he podido caminar un poco más segura.

No sé que me deparará los próximos kilómetros que me quedan, no sé por donde irán mis pasos. Cuantas tristezas y alegrías me quedan. No sé si estoy preparada para todas, pero dentro de mi me dice continua, ten fe y que en cierta forma me da fortaleza.

Sé que en cierta forma estoy a merced del camino, que hay cosas que puedo cambiar y que otras no. Sólo están, sólo se presentan y que debo aceptar y buscar lo positivo en ellas y de intentar otra ruta del camino.

Intento guardar fortaleza para lo que venga, más que nada para poder aceptar las cosas que no espero, las cosas que tal vez no me agraden o las que me confundan.

He sido fuerte y débil, pero siempre ha ganado la parte fuerte, he podido combatir contra esa debilidad. Se que siempre se presenta y se apodera un poco, por un momento, intentando jugar una mala pasada…

Sé que el camino tiene muchas piedras, algunas gigantes, otras grandes, medianas y pequeñas. Intentaré seguir saltándolas y esquivándolas, si tropiezo con una de ellas me levantaré, me curaré y seguiré y dejaré que la fuerza de mi espiritu me guie.

2 comentarios:

  1. un texto muy positivo anna, y una muy buena foto la que compartes, observandola se puede sentir la arena y la brisa, los niños me expresan ternura y lo natural de la sinceridad, y el mar una sensación de tranquilidad, de que todo va a estar bien...

    Un enorme abrazo,

    Belén

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  2. Y vaya que los caminos tienen piedras, pero tal y como lo he leído hay que levantarse y tratar de ser positivos.

    Abrazos...

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